Todo comienza con una campaña secreta de relaciones públicas que data de los años setenta. Durante cuarenta años, la industria del azúcar desvió todas las amenazas a su imperio multimillonario, mientras endulzaba el suministro de alimentos del mundo. A medida que la obesidad, la diabetes y las tasas de enfermedades cardíacas se disparan, los médicos están tratando a la primera generación de niños que sufren de enfermedad hepática grasa. La industria azucarera está nuevamente bajo asedio. Ellos esquivaron la bala una vez. ¿Pueden hacerlo otra vez? Hoy en día, la industria está desplegando sus viejas tácticas y sacando el viejo adagio "solo comemos demasiado" pero esta vez los consumidores no se creen, los críticos se han vuelto más inteligentes, más audaces y la ciencia se está poniendo al día con respecto al peligro que supone el azúcar en nuestra vidas.
Aderezo para ensaladas, salsa barbacoa, salsa de tomate, bollos y carne
para hamburguesas. De todos los alimentos envasados que encontramos en
una tienda de comestibles, el 64% contiene azúcar añadido. El azúcar,
que se esconde en la comida procesada y los dulces, puede estar detrás
de que en los últimos treinta años, la tasa de obesidad se haya
duplicado y la diabetes se haya triplicado.
