El Doctor Barry Fell de la Universidad de Harvard presentó en su libro Saga americana y América BC (1980) evidencia científica sólida que apoyaba la llegada, siglos antes de Colón, de fenicios, celtas, africanos, romanos y musulmanes del Norte y Oeste de África. El Doctor Fell descubrió la existencia de megalitos como los ibéricos e irlandeses, encontró ogham (la escritura druida y celta de Irlanda y España), monedas e inscripciones fenicias, y romanas y escuelas musulmanas en el Valle del Fuego en Perú, en Allan Springs, en Logomarsino, el Cañon Keyhole (Nevada), en Mesa Verde (Colorado), en el Valle Mimbres (Nuevo Mexico) y en Tipper Canoe (Indiana) en fechas próximas al 700-800. En un antiquísimo Libro del Tíbet, se describe un mapa, en el que quedan situadas con precisión Jerusalén, Babilonia, el mar Caspio, y otros lugares. Heródoto, ya en el siglo V antes de Cristo, escribió que Aristágoras de Mileto poseía una tablilla, en la que estaban grabados los mares y las tierras. En la Universidad de Yale se guarda un mapa, fechado en el año 1440, que demuestra, sin lugar a duda alguna, que los vikingos llegaron a Groenlandia y a Canadá, siglos antes de que lo hiciera Cristofake Colón, como el famoso Erik el Rojo. En la mayoría de culturas mesoamericanas, se aprecian jefes de tribus y reyes con barba blanca, nariz aguileña y pelo claro además de pelo en pecho, contrario a los imberbes indígenas. En el arte olmeca aparecen tanto negros, como orientales o seres barbudos europeos. Los antropólogos han probado que los mandingas -siguiendo instrucciones de Mansa Musa- exploraron muchas partes de América del Norte a través del Mississipi y otros sistemas fluviales. En Four Corners, Arizona, hay escrituras que muestran que incluso llevaron elefantes africanos a la zona. Durante su segundo viaje, los indios de la Española (Haití) le dijeron que había habido gente negra antes de su llegada a la isla, como prueban las grandes cabezas olmecas. Como prueba, le mostraron a Colón las lanzas de estos musulmanes Africanos. Cristóbal Colón admitió en sus cartas que el Lunes, 21 de Octubre de 1492, cuando su barco navegaba cerca de Gibara al noreste de Cuba, vio una mezquita en la cima de una bella montaña. Las ruinas de mezquitas y minaretes con inscripciones de versos coránicos han sido descubiertas en Cuba, Méjico, Texas y Nevada. Un conocido historiador y lingüista, Leo Weiner de la Universidad de Harvard, en su libro, África y el descubrimiento de América (1920) escribió que Colón estaba bien informado acerca de la presencia Mandinga en el Nuevo Mundo y que los musulmanes de África Occidental se habían extendido por todo el Caribe, y por los territorios de América del Norte, Sudamérica y América Central, incluyendo el Canadá, donde comerciaban y contraían matrimonio con los iroqueses y los indios algonquinos. Un historiador y geógrafo musulmán, Abul-Hassan Ali Ibn Al-Hussain Al-Masudi (871-957), escribió en su libro Muruj adh-dhahab wa maadin aljawhar (Los prados de oro y las canteras de joyas) que durante el reinado del Califa Andalusí, Abdullah ibn Muhammad (888-912), un navegante musulmán, Jashjash Ibn Said Ibn Asuad, de Córdoba, zarpó de Delba (Palos) en el 889, cruzó el Atlántico, llegó a un territorio desconocido (ard majhula) y volvió con tesoros fabulosos. Cristofake Colón y los primeros exploradores españoles y portugueses pudieron surcar el Atlántico gracias a la información geográfica y navegacional de los musulmanes; en particular de mapas hechos por comerciantes musulmanes, que incluyen a Al-Masudi (871-957) con su libro Ajbar az zaman (Historia del Mundo) que está basado en material recopilado en África y Asia. De hecho, Colón tuvo dos capitanes de origen musulmán durante su primer viaje transatlántico: Martín Alonso Pinzón era el capitán de la Pinta y su hermano Vicente Pinzón era el capitán de la Niña. Eran acomodados, expertos armadores que ayudaron a organizar la expedición de Colón y prepararon el buque insignia, la Santa María. Hicieron esto asumiendo los gastos por razones tanto políticas como comerciales. La familia Pinzón estaba emparentada con Abu Zayan Muhammad III (1362-1366), el sultán marroquí de la dinastía merinida (1196-1465). ¿Para quien trabajaba Colón?
La clave de la simbología, la Cruz de Malta (ver artículo sobre los Caballeros de Malta en Wikipedia) La cruz Illuminati templaria hasta en la velas