Hablando del poder efectivo, se puede afirmar que no son los Rockefeller
sino los Rothschild los más grandes. En sucesión ascendente siguen los
Bilderberger, un club formado por los 500 hombres y organizaciones más
ricas e influyentes del mundo; a la cabeza de este club restringido está
Rockefeller; son miembros del mismo, entre otros, la Casa Real
Holandesa, la de Inglaterra y la de Mónaco, Mountbatten y ramas de los
Dupon, de los Kennedy y Onasis; y como organizaciones de primera línea,
el Vaticano, Strauss, Lockheed, Lengemann, Calbi y la Logia P2, no
fueron ninguna casualidad. Más arriba está el Consejo de los Treinta y
Tres, los 33 más altos masones iniciados del mundo. Por encima de estos,
el Gran Consejo de los Trece, 13 grandes druidas que constituyen el
clero privado de los Rothschild. Por encima todavía se encuentra el
Tribunal, las tres familias Rothschild y finalmente el inmencionable
nombre de Grado Setenta y Dos de los cabalistas, que digamos de paso
también significa iluminado.