Michel Collon, periodista e investigador de los medios de comunicación,
nos informa sobre la manipulación sionista y el plan de colonización de
Israel... Michel Collon, Animador del sitio web
http://www.michelcollon.info, Responde a los grandes mitos que sirven para justificar a Israel y su política.
Michel
Collon acaba de publicar el libros "Israel, hablemos de ello" donde se
recogen veinte entrevistas a Chomsky Ramadan, Gresh, Sand, Pappe y todos
los mejores analistas del conflicto´. Preparando el libro "Israel,
hablemos de ello", preguntamos a las gente en Bruselas, al azar, ¿Qué
sabía de Israel y de su historia? La respuesta era catastrófica. Había
una gran ignorancia del público y yo creo que esa ignorancia no se debe
al azar. Hace más de sesenta años que los medios de comunicación
europeos, que se dicen los "mejores del mundo", "que informan al pueblo"
y, sin embargo, el público no sabe lo esencial. Yo creo que se debe a
una operación de propaganda israelí, realizada con ayuda de los grandes
medios y yo lo he resumido en las 10 grandes mentiras mediáticas que
justifican a Israel.
La primera gran mentira mediática es que se
dice que Israel fue creada en reacción al genocidio de los judíos en
1940-1945. Esto es totalmente falso. En realidad, este es un proyecto
colonial que estaba ya previsto. Es en el Congreso de 1897, cuando el
movimiento nacionalista judío decide colonizar Palestina. En ese momento
el colonialismo estaba en auge. Ellos piden ayuda a las potencias
coloniales, porque se dan cuenta que necesitan una protección. Primero
al imperio turco, pero no muestran interés. Luego al imperio Británico
que sí estaba muy interesado en tener colonos instalados en medio del
mundo árabe, entre la parte Este y Oeste, que quería debilitar al
pujante Egipto y quería controlar el Canal de Suez, el camino hacia la
India que tiene muchas riquezas. Después Estados Unidos tomará el relevo
por la cuestión del Petróleo. Por tanto, la creación de Israel no es
algo de 1940-1945, sino más bien fruto de un proyecto colonial. Hay que
recordar que en esa época las potencias coloniales se reparten África
como un pastel, en la Conferencia de Berlín de 1885 se la reparten entre
Inglaterra, Francia, Bélgica, Portugal, España y Alemania, allí no es
invitado ningún africano. Se trata, pues, de una época colonial e Israel
es un proyecto colonial. Así es.
Los judíos regresan a la tierra
que les fue arrebatada por el Imperio Romano en los años 70 d.C. Esto
es un mito absoluto, porque yo he entrevistado en el libro al
historiador Schlomo Sand y él ha hablado con arqueólogos e historiadores
de Israel y todos ellos dicen que no hubo éxodo ni retorno; en conjunto
la población se quedó allí, el grueso de la población se quedó allí,
pero no hubo éxodo, el grueso de la población se quedó allí. Esto tiene
dos consecuencias: La primera es que, en el fondo, los descendientes de
esos judíos que vivieron en la época de Jesucristo, son los palestinos
que viven ahí hoy y, la segunda, es que si no hubo gente que marchó
¿Quiénes son entonces esos que dicen que retornan? En realidad, son los
convertidos: europeos del Este y del Oeste, magrebíes... Son los que se
han convertido al judaísmo en distintos momentos y por diferentes
razones, pero no el pueblo judío. Y como dice Sand el pueblo judío no
existe como tal, pues no hay una misma historia, ni una misma cultura,
ni una misma lengua. Sólo comparten una misma religión, pero la religión
no es un pueblo; no se habla de pueblo cristiano o musulmán, así que
tampoco de pueblo judío.
El tercer gran mito: es que no es tan
grave que hayan colonizado esa tierra porque, aquello era un desierto y
estaba vacío. Eso es también una absoluta mentira. Los testigos de la
época, de finales del Siglo XIX, dicen que Palestina era un océano de
trigo, había cultivos, exportaciones, por ejemplo, a Francia. Producción
de jabón, de aceite, de las famosas naranjas. Y cuando los colonos
británicos y después los judíos vienen a instalarse a Palestina a partir
de 1920, los campesinos palestinos se niegan a darles sus tierras y hay
revueltas, huelgas generales, manifestaciones con numerosos muertos.
Hasta una guerrilla Palestina. Lo que ha destruido todo esto ha sido la
enorme represión que ha ejercido el ocupante británico, primero, y
sionista después.