El 12 de febrero de 1976, dos beduinos caen abatidos a manos
del ejército de Marruecos cuando se disponen a buscar agua. No han
pasado ni cuatro meses desde que un día de octubre como el de hoy, el
rey Hassan II haya dado inicio a la
Marcha Verde.
España, que aún seguirá siendo administrador de su colonia saharaui
junto a Marruecos y Mauritania en un gobierno tripartito y provisional
hasta dos semanas después de ese 12 de febrero, ya ha anunciado, sin
embargo, que deja sus posesiones.
El rey Hassan II, que ve peligrar el codiciado trozo de
pastel con la resolución de la ONU que advierte de que debe ser el
propio pueblo saharaui quien determine si se independiza o se anexiona a
Marruecos, envía 350.000 de sus ciudadanos y 25.000 soldados a ocupar
esa colonia rica en recursos naturales. Se trata de una estrategia que
busca legitimar tal adhesión a la que se acompaña, en paralelo, de una
cruenta caza de saharauis
a los que pretende despejar del mapa con fósforo y napalm. Es en ese
paisaje de "limpieza" donde caen abatidos los dos beduinos.
Casi 40 años después, el Instituto de Estudios sobre
Desarrollo y Cooperación Internacional 'Hegoa', del País Vasco, recibe
una llamada de la Asociación de
Familiares de Presos y Desaparecidos Saharauis
(AFAPREDESA), desde los territorios "liberados" del Sáhara occidental.
Un beduino dedicado al pastoreo de cabras y camellos de la zona ha
encontrado restos humanos, un hallazgo que coincide con el relato de un
testigo, entonces un crío de 14 años, que se salvó por poco de ser el
tercer ocupante de una fosa común aquel 12 de febrero de 1976.
"Y el Instituto Hegoa se puso en contacto con nosotros [la
Sociedad de Ciencias Aranzadi], dada nuestra trayectoria y experiencia
en materia de exhumaciones por la
recuperación de la memoria histórica",
explica Eztizen Miranda, autora de este documental que narra la
historia de un primer viaje al Sáhara occidental capitaneado por el
médico forense Francisco Etxeberria, el pasado mes de junio, que
concluiría con el descubrimiento de dos fosas comunes y ocho cuerpos de
civiles abatidos por el ejército marroquí, dos de ellos niños.
En poco menos de un mes, el equipo de Etxeberria regresa a la zona en busca de más fosas comunes.
De momento, tienen localizadas otras dos. "Esto no ha hecho más que empezar", advierte Miranda.
"La semilla de la verdad", documental que recupera el olvido
internacional al que fue sometido un pueblo masacrado y desterrado al
desierto más cálido del mundo, fue presentado en el pasado X Festival de
Cine del Sáhara (FiSahara)
.