Bajo el estandarte de su extremismo islamista, el DAESH ha creado uno de
los regímenes más brutales con las mujeres de todos los tiempos. El
ISIS capturó y sometió a más de cuatro millones de mujeres cuando hace
un año arrasó Siria e Irak. Ante semejantes atrocidades, un grupo de
hombres arriesgan sus vidas entrando en el Estado islámico para
liberarlas y han permitido por primera vez, que su comprometido trabajo
sea grabado por las cámaras.